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Tres T de lucha en el tercer encuentro mundial de Movimientos Sociales con el Papa Francisco (Roma, 02-05/11/2016)

Alrededor de 200 representantes de los movimientos sociales y redes de 67 países de todo el mundo estuvieron reunidos para presentar la experiencia de su organización de base y la lucha constante por el bienestar de las comunidades y la defensa de sus derechos.

Las propuestas de AIH que también afectan a las responsabilidades de la iglesia católica en el sector inmobiliario, fueron presentadas al Papa Francisco frente a más de 3300 personas.

Roma, Ciudad del Vaticano.

Fue una iniciativa convocada por el Pontificio Consejo Justicia y Paz junto con la Academia pontificia de las ciencias sociales, los representantes de los movimientos sociales y las organizaciones de base que han estimulado enormemente este espacio mundial, participó la Alianza Internacional de Habitantes, con gran entusiasmo y presencia en el proceso de preparación, desde el primer encuentro en Bolivia en 2014.La AIH  ha reforzado en este espacio su estrategia de construcción de convergencias  en la Vía urbana y Comunitaria.

Este tercer encuentro se dedicó a identificación de  propuestas de los diferentes grupos, para luchar contra las situaciones de injusticia y defender los derechos a las tres T, es decir, Tierra, Techo y Trabajo. Uno de los desafíos fue la interacción del proceso de comparación internacional que ya había comenzado, con las experiencias italianas identificadas  durante los 3 días de trabajo.
Cerca de 200 representantes de movimientos sociales y redes de 67 países de todo el mundo estuvieron presentes. Cada representante presentó la experiencia de su organización de base y la lucha constante por el bienestar de las comunidades y la defensa de sus derechos.

Tierra, Techo y Trabajo: la democracia popular, la tierra, la naturaleza y los refugiados

Siguiendo estos ejes, el encuentro fue ante todo una gran oportunidad para acercar las luchas, intercambiar, proponer y debatir de acuerdo con los objetivos comunes:

• identificar nuevas herramientas;

• dar la palabra a aquellos que normalmente no se hacen sentir, dándoles la oportunidad de compartirlo;

• animarlos y acompañarlos en sus esfuerzos por ser protagonistas de su propio desarrollo, aumentando su contribución a la construcción de una sociedad que respeta la dignidad de todas las mujeres y todos los hombres;

• examinar de manera critica los modelos de desarrollo económico en los testimonios de sus víctimas, las distorsiones del modelo dominante, en busca de alternativas realmente comprensibles;

•promover las oportunidades de dialogo y las formas de coordinación global entre las organizaciones y los movimientos populares; respaldar el dialogo entre los movimientos populares (ya sean cristianos o no) y la iglesia a todos los niveles (universal, regional y nacional), igualmente en vista de estimular el compromiso de las iglesia locales.

El último día se dedicó a la audiencia pública en presencia del Papa Francisco, quien expresó su total solidaridad y apoyo a las conclusiones y recomendaciones lanzadas e hizo un llamado en favor de los derechos de los pueblos.
La labor de los grupos dio como resultado Recomendaciones y Decisiones tomadas gracias a los intercambios de las delegaciones participantes que terminaron el 5 de noviembre, durante el cual tuvo lugar el dialogo con el Papa Francisco, y la presentación del documento final de la reunión de propuestas.

Las propuestas de los movimientos sociales en relación a la vivienda:

1. Avanzar en el diseño de leyes y reglas que garanticen el derecho a la vivienda como un derecho inviolable.
2. Acciones hacia el usufructo de las casas disponibles, para el beneficio de la gente. Donde quiera que estén, deben ser tributables y expropiadas a aquellas que no cumplen una función social.
3. Replantear el modelo habitacional basado en la cultura y las tradiciones de los países interesados, creando espacios relacionados con las necesidades y aspiraciones de nuestros pueblos.
4. Aplicar el modelo participativo para la creación y consolidación de un sentido de comunidad gracias a la construcción de soluciones colectivas.
5. Ejercer presión en favor de la planificación y realización de una política de integración urbana que considere la "casa" como un derecho humano fundamental, para regularizar la tenencia de tierra y asegurar el acceso a un hábitat saludable.
6. Presentación de la autogestión y el modelo de autoayuda. Las soluciones alternativas al problema de vivienda promovidas por las organizaciones sociales deben prever la propiedad colectiva de tierras, vivienda y el derecho al usufructo, garantizando el acceso a una vivienda adecuada.
7. Promover en octubre, el mes de "la lucha mundial por el hábitat" (el 10 de octubre, la ONU celebra el día mundial del hábitat) para desarrollar acciones colectivas para defender el derecho a la vivienda.
8. Lanzar una campaña global "Cero Desalojos" con el apoyo del Papa Francisco.
9. Facilitar el acceso gradual a las tierras de la iglesia para fomentar la construcción de las tres "T".

Las propuestas y recomendaciones específicas se han centrado :

1. Desarrollar acciones directas participando en el plan legislativo y en las iniciativas globales para la defensa de los bienes comunes esenciales.
2. La lucha contra los desalojos de los campesinos de sus tierras. Respetando el conocimiento local y cultural del pueblo y su forma de vida.
3. Desarrollar una acción contra la concesión de patentes sobre semillas. La soberanía alimentaria depende de la libertad y acceso a las semillas.
4. Auto organizar servicios sociales como la salud, que reconocen la dignidad de las personas, defienden la identidad y el respeto de las tradiciones campesinas e indígenas.
5. Luchar contra el acaparamiento de tierras y en favor de las leyes internacionales que restringen el acceso al capital extranjero y la concentración de la tierra. Debe haber una propiedad colectiva de tierras, con el fin de asegurar la aplicación de su función social, que es alimentar y dar vida a la gente.
6. Construir una reforma agraria que promueva el empleo local, la lucha contra los venenos agrícolas, la defensa de la salud, la dignidad de los seres humanos y del planeta.
7. Fomentar una educación en masa mediante la creación de canales de participación en consonancia con la cultura de las personas concienciando y sensibilizando a la seguridad alimentaria, así como a la seguridad de las personas que sufren de represalias por su lucha por la democratización de la tierra,

Promover el rol de los excluidos en su lucha por las tres "T" (Tierra, Techo y Trabajo).

  • Contribuir a la construcción de los cambios estructurales que el mundo necesita, apoyados por las propuestas del Papa Francisco anunciadas en el Evangelii Gaudium y Laudato Si.
  • Ayudar a las poblaciones a coordinar las acciones a nivel de las organizaciones regionales e internacionales.
  • Fortalecer el dialogo y la cooperación entre la iglesia (a nivel nacional, regional y mundial) y las organizaciones de base.

El encuentro concluyó con el compromiso de continuar este proceso de convergencia de las luchas de las organizaciones populares, en particular para las próximas reuniones a nivel local, nacional, regional e internacional.

 

Las recomendaciones y compromisos en la audiencia final

En la reunión final, los portavoces de los grupos de trabajo presentaron las recomendaciones delante del Papa Francisco y más de 3000 personas.

El discurso de Soha Ben Slama, representante de AIH y portavoz del grupo de trabajo sobre vivienda:

Un agradecimiento especial al Papa Francisco y a todos sus colaboradores que hicieron posible este encuentro y este diálogo.

Somos movimientos populares a nivel internacional provenientes de Europa, África, América Latina,  Norteamérica, Asia, Oceanía y Nueva Zelanda. Somos los portavoces de nuestros grupos de activistas por el derecho a la vivienda.

Nos conocimos hace dos semanas en el Foro Social Resistencia a Hábitat III en Quito, para intercambiar, definir y para implementar soluciones concretas, inmediatas y prácticas para el derecho a la vivienda. El Tribunal Internacional de Desalojos, en su quinto período de sesiones, fue el ejemplo más eficaz.

Hay más de 1000 millones de personas que están en viviendas inadecuadas o sin hogar. 70 millones en riesgo de desalojo debido a guerras económicas, religiosas y desastres naturales. Estos temas son tabú para la Nueva Agenda Urbana de la ONU, que quiere desarrollar la ciudad constantemente  porque considera la vivienda y la tierra como bienes y no como un derecho.

Incluso en Italia, este tema es muy controvertido porque los que se resisten, son considerados como enemigos del desarrollo. En este sentido, doy un gran saludo a mis colegas italianos que luchan todos los días.

El mensaje que lanzan los movimientos del mundo es que todos luchemos juntos. Nuestra diversidad es un activo y una fuente de esperanza para todos los pueblos.

Con esta resistencia, proponemos políticas de vivienda y de desarrollo urbano basado en los derechos humanos y en el respeto de la naturaleza, sin olvidar nuestra responsabilidad hacia las generaciones futuras.

Vivienda social, cooperativas, control público de arrendamiento. ¡BASTA al acaparamiento de tierras y ciudades!

Exigimos coherencia también en la iglesia: ¡que todas sus tierras, casas y propiedades sean declaradas Cero Desalojos!

La participación de la delegación AIH:

La delegación de la Alianza Internacional de Habitantes, compuesta por Cesare Ottolini (Italia), Soha Ben Slama (Túnez), Guillermo Rodríguez Curiel (México), Margarita Valenzuela (Guatemala), Elizabeth Santos (Venezuela) y Eduardo Cardoso (Brasil), ha conseguido reforzar las convergencias de luchas promovidas para la estrategia de la Vía Urbana y Comunitaria. En particular, se ha subrayado la necesidad de apoyar la Campaña Cero Desalojos en el mundo entero para la defensa del derecho a la vivienda digna y adecuada, el derecho a la tierra, en un planeta justo para así vivir mejor. La delegación estuvo muy activa en los debates, en los grupos de trabajo  y en  las propuestas de acción transformadora del documento final.
Los portavoces de AIH, insisten en el reconocimiento de la AIH en su política de dialogo continuo a nivel de los movimientos de base y a nivel formal, en la persona de Elizabeth Santos, representante del grupo Tierra y Soha Ben Slama de Vivienda, tuvieron el honor de tomar la palabra delante del Papa y 3.300 personas que participaron en la última sesión plenaria (Sala Pablo VI, Ciudad del Vaticano, el 5 de noviembre del 2016) y presentar sus propuestas.

El encuentro entre la AIH, la Cooperativa Vivere 2000 y la Unión de Inquilinos: la solidaridad gana

Con motivo de este encuentro, la delegación AIH visitó la Cooperativa Vivere 2000 y la Unión de Inquilinos. La Cooperativa es un ejemplo concreto del éxito de las luchas: personas sin hogar y desalojados ocuparon ilegalmente en el centro de la ciudad una propiedad pública que podría haber sido víctima de especulación. Las luchas y negociaciones obtuvieron la regulación de los residentes, el reconocimiento de la labor de auto rehabilitación y una ley regional que apoya este tipo de soluciones que, en la actualidad, se refieren a varias docenas de edificios en Roma.

La reunión con los activistas de la Unión de Inquilinos, el sindicato entre los fundadores de la AIH, fue cálida. Los desalojados y los que tienen problemas de vivienda encuentran aquí respuestas y ayuda competente para apoyar las luchas por el derecho a la vivienda. Disponibilidad total para fortalecer el intercambio local, mundial y la movilización por el derecho a la vivienda y a la ciudad sin fronteras, particularmente a nivel europeo y en el marco de las Jornadas Mundiales  Cero Desalojos.


El(la) siguiente Traductor(a) Voluntario(a) por el derecho a la vivienda sin fronteras de la AIH colaboró con la traducción de este texto:

Guiselle Leyton

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