Home » Campaña Cero Desalojos » Campaña Cero Desalojos

Mostra/Nascondi il menu

Campaña Cero Desalojos

Campaña Cero Desalojos

La solidaridad internacional, un arma para construir dignidad y seguridad habitacional

Actualmente, mil millones de personas sufren en todo el mundo a causa de la inseguridad habitacional provocada por grandes inversiones del capital financiero e inmobiliario, discriminaciones sociales, económicas y raciales, guerras, desastres naturales. Esta cantidad de personas sin techo y que viven en condiciones habitacionales precarias, en lugar de disminuir en 100 millones para el 2020, como establece el séptimo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, está destinada a crecer en otros 700 millones para el 2020.

La causa principal es la problemática urbana, sometida a las reglas neoliberales dictadas por el FMI y el Banco Mundial que imponen recortes en las políticas sociales y privatizaciones en el sector.

Para afrontar esta dramática situación, la Alianza Internacional de Habitantes lanzó la Campaña Cero Desalojos durante el 4º FSM (Mumbai, enero de 2004), que promueve la solidaridad internacional, comenzando por los habitantes directamente interesados, para devolver la esperanza de la dignidad y de la seguridad habitacional utilizando todas las herramientas necesarias.

El objetivo de la campaña es defender el derecho a la vivienda para todos y que ninguna persona debe ser desalojada. Si es necesario reubicar a los habitantes, se deben encontrar previamente soluciones habitacionales dignas, seguras y acordadas con los afectados. Esto significa que se debe respetar el art. 11 del Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, especialmente en lo referido a los Observaciones Generales nº 4 (1991) y nº 7 (1997) realizadas por el Comité de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU.

Para ello, la AIH propuso construir un espacio común de todos los movimientos sociales urbanos con el fin de unificar las iniciativas locales, nacionales e internacionales. Asimismo, invitó a las ONG, las redes que se ocupan del derecho a la vivienda, las instituciones y el sistema de las Naciones Unidas a apoyar esta campaña.

Esta también es la base de la actividad de los representantes de la AIH en el UN-Advisory Group on Forced Evictions (AGFE).

Cómo ?

La Campaña Cero Desalojos se articula en varios niveles, determinados por el grado de adhesión y de compromiso de las organizaciones involucradas localmente y según la gravedad del caso:

  • Sistema de alerta internacional, con antenas locales, de las violaciones del derecho a la vivienda
  • Llamados a la solidaridad internacional
  • Propuesta de misiones exploratorias y de conciliación de UN-AGFE
  • Apoyo para el intercambio de experiencias de prácticas provechosas de las asociaciones de habitantes, poderes locales, y otros entes para evitar desalojos.
  • Apoyo para la redacción y el monitoreo de planes de acción local, nacional e internacional para la seguridad habitacional.

Dónde ?

Nairobi (Kenya) : 300.000 personas están amenazadas de desalojo debido a las inversiones en infraestructura (autopistas, líneas ferroviarias y eléctricas). La Campaña ¡Viva Nairobi Viva! se desarrolló en el ámbito local (movilizaciones, recursos legales, encuentros) e internacional (gracias a una página web especial se enviaron alrededor de 10.000 e-mail a todas las instituciones involucradas). La Campaña detuvo los desalojos. Ya se ha activado el debate sobre la reforma urbana y la seguridad habitacional, que debería estar financiada por un Fondo Popular para la Tierra y la Vivienda para canalizar los recursos de una parte de la deuda externa que ha sido condonada a Kenya. Han comenzado las negociaciones para que se destinen al Fondo 45 millones de euros, liberados gracias a la conversión de la deuda exterior de Kenya con Italia, para experimentarlo en dos de las zonas más pobres de esta ciudad.

Zimbabwe : En el 2005, 700.000 personas fueron echadas a la calle en el marco de la «Operación Murambatsvina» («acaba con la basura»), promovida por el gobierno de Zimbabwe. Sin embargo, el número total de personas afectadas por esta operación sería superior a 2,5 millones, en país con una población de 12,5 millones de habitantes, de los cuales 300.000 son niños obligados a abandonar la escuela. La movilización local, apoyada en el ámbito internacional por la «Operación Restablecer el derecho a la vivienda en Zimbabwe» exigió detener las demoliciones y los desalojos, emprender un plan de mejoramiento de las zonas más pobres en conjunto con las comunidades afectadas y condonar la deuda externa de modo que los recursos que destinaban a tal fin se inviertan en el Fondo Popular para la Tierra y la Vivienda. Estas iniciativas llevaron a la comunidad internacional a interrogarse sobre el papel del presidente Mugabe, antiguo líder anti-colonialista. Asimismo, fue enviada una misión de las Naciones Unidas al lugar para investigar los desalojos.

Nigeria : A finales de 2005, el presidente Obasanjo llevó a cabo una de las operaciones de desalojo más violentas y masivas que se conozcan: más de 4 millones de personas (de un total de 7 millones de habitantes) corren el riesgo de ser desalojados con la aplicación del plan maestro en Abuja, la capital del país. A esta importante cifra, se deben agregar las 20.000 personas que corren el riesgo de ser desalojadas de sus viviendas de propiedad pública en Lagos, una arremetida brutal por parte del Ministerio de la Vivienda y de la Defensa, decididos a privatizar el sector. Decenas de asociaciones locales y de Iglesias manifestaron su descontento apoyando la consigna «¡Romper el silencio sobre los desalojos: defender el derecho a la vivienda en Nigeria! » lanzada por la «Coalición Nigeriana Desalojos Cero», que exigía detener las demoliciones y las expulsiones, recompensar y reubicar inmediatamente a las personas sin techo, bloqueando las privatizaciones y el plan maestro de Abuja y exigiendo asimismo que se detengan todas las inversiones extranjeras que se traducen en la violación de los derechos humanos. El llamado consiste en destinar los recursos financieros disponibles por la condonación de la deuda externa para el Fondo Popular para la Tierra y la Vivienda.

República Dominicana : 1 millón de personas corren el riesgo de ser desalojadas de los terrenos en los que viven sin un título de propiedad debido a las especulaciones edilicias. La Campaña lanzada durante la Jornada Mundial Cero Desalojos 2004, involucró a las asociaciones de base y a la provincia de Santo Domingo y cuenta con el apoyo del gobierno de los Países Vascos. La campaña detuvo en parte los desalojos y favoreció la convocatoria de una mesa de diálogo y concertación. También en este caso se discute sobre el Fondo Popular para la Tierra y la Vivienda y se creó la Cooperativa de Vivienda (COOPHABITAT) para ofrecer alternativas válidas. UN-AGFE organizó una misión exploratoria y conciliatoria (marzo de 2005), pero los desalojos violentos continúan e, incluso, algunos son llevados a cabo por grupos paramilitares por la fuerza de las armas. Por ello, se prevé ejercer mayor presión para abrir otros frentes de batalla, boicoteando especialmente algunas empresas turísticas implicadas en estas acciones.
A remarcar que la coordinación de la Campaña Desalojos Cero para América Latina y el Caribe está en Coophabitat.

Italia : 600.000 personas podrían ser objeto de desalojos arrendaticios provocados por la morosidad y el arrendamiento terminado y por las privatizaciones en el sector de las viviendas populares. La movilización consistió en iniciativas de resistencia a los desalojos, importantes manifestaciones públicas, iniciativas parlamentarias y presentación de dossier a las Naciones Unidas. Mediante esta Campaña, el Comité de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU presentó un grave reclamo al Gobierno, mientras que la UN-AGFE organizó la primera misión nunca antes realizada en un país del G7 (febrero de 2005), que llevó a la firma de un protocolo con el municipio que declara a Roma como «ciudad libre de desalojos». Por otra parte, los alcaldes y presidentes de los municipios confiscaron viviendas vacías. En enero de 2007 se ha logrado la moratoria parcial de los desalojos.
La movilización continúa.

Francia : 500.000 personas podrían ser objeto de desalojos arrendaticios provocados por la morosidad. En la campaña hubo iniciativas de resistencia a los desalojos, ocupaciones de viviendas y oposiciones a las demoliciones de los HLM (viviendas de renta limitada). Algunos municipios declararon también sus territorios «libres de desalojos» por decreto. La campaña obligó al gobierno a introducir una norma para la transformación de una parte de los desalojos en nuevos contratos, apoyando la aprobación de un plan extraordinario para construir 500.000 casas populares en 5 años.
Los incendios de muchas casas insalubres, que provocaron decenas de muertos en el verano de 2005 en París, enfatizaron la necesidad de continuar las acciones de protesta en diferentes niveles. Dado que los desalojos violentos continuaron después de la tregua concedida en invierno, las manifestaciones volvieron a hacerse presentes.

Croacia : Luego de la guerra que desintegró a Yugoslavia, en 1996 fue aprobada una ley que privó a los inquilinos (40.000 personas) del derecho a ocupar para siempre los apartamentos privados, derecho transmisible por herencia del que gozaban desde 1945. Luego del decreto de la Corte Constitucional que abolía la obligación de proporcionar adecuadas viviendas alternativas, y con el aumento de más del 60% de los alquileres a finales de 2005, se desencadenó una ola de desalojos violentos que afectó a los pobres y los ancianos.
La Campaña «Restituir el derecho de los inquilinos a la seguridad habitacional» , lanzada por la Alianza de las Uniones de los Inquilinos y por decenas de organizaciones y partidos políticos, exigió detener los desalojos de este tipo y la abrogación de normas contrarias a los tratados internacionales, para proteger los derechos humanos y el derecho a la vivienda. A tal fin, la Campaña online que recogió miles de firmas, exige asimismo a los organismos internacionales que ejerzan presión, especialmente ahora que Croacia está en negociaciones para ingresar a la Unión Europea.

Dale Farm, Basildon (Gran Bretaña) : Se trata de la comunidad más grande de nómadas del Reino Unido, instalada en pequeñas casas, casas rodantes y caravanas, en terrenos que les pertenecen y que anteriormente estaban llenos de armazones de automóviles. Esta comunidad autónoma, que habla el Gammon, lengua que tendría orígenes anteriores a la lengua de los celtas, puede ser víctima de la «limpieza étnica» del Consejo Departamental de Basildon, que decidió destruir una gran cantidad de casas de esta comunidad, como consecuencia de una agresiva campaña de los Conservadores contra los Gitanos.
La consigna «Desalojos Cero Ruedas Rojas en el Reino Unido» , apoyada por decenas de organizaciones y personalidades, entre las cuales la actriz Vanessa Redgrave, se propone detener los desalojos y exige al gobierno la creación de una comisión de investigación, así como la abrogación de las normativas gubernamentales y del Consejo Municipal Local que se oponen a los tratados internacionales sobre los derechos humanos y a la vivienda.

Tamil Nadu, India: PASUMAI THAAYAGAM (Green Mother Land), ha informado que la campaña de demolicion ordenada por las autoridades de Chennai, Tamil Nadu, ha dejado sin hogar a cerca de 30.000 personas, de las cuales 5.000 son estudiantes.
Los habitantes de la zona del lago Porur han sido desalojados por la fuerza, sin notificación previa ni comunicado oficial alguno. Entre el 23 y el 25 de noviembre de 2006, apareció un gran número de policías en el lugar con excavadoras y topadoras para demoler los asentamientos. El desalojo tomó a los habitantes por sorpresa, dado que los funcionarios del gobierno habían prometido brindarles los servicios públicos indispensables y, de hecho, el asentamiento ya contaba con una planta de suministro eléctrico, una estafeta de correo y teléfonos públicos.
El 2 de diciembre de 2006, el gobierno estatal ha formado grupos a nivel estatal y de distrito para iniciar lo antes posible el desalojo de los terrenos gubernamentales usurpados. De este modo, los desalojos que se producirán próximamente a lo largo el estado de Tamil Nadu amenazan a cerca de un millón de personas que se quedarán sin hogar.
En vista de la situación, se ha lanzado una “Campaña por el Derecho a una Vivienda Digna y Desalojos Cero" en Tamil Nadu, India.

A demás, la AIH envió mensajes de solidaridad en contra del desalojo a Lima (Perú), Nueva Delhi (India), Karachi (Pakistán), Cebu y Manila (Filipinas), Beijing (China), Quilombo, Sao Paolo, Curitiba y Porto Alegre (Brasil), Territorios Ocupados (Palestina), Nagoya (Japón), Bishkek (Kirguistán), Barcelona y Sevilla (España), Hungría, Milan y Boloña (Italia), Puerto Said (Egypto), Nueva Orleans (Estados Unidos), Paraguay, Sochi (Federación Rusa).

La propuesta de los Fondos Populares para la Tierra y la Vivienda

Generalmente los desalojos se producen por grandes inversiones en carreteras, líneas ferroviarias, centros de servicios, centros turísticos o comerciales, entre otros, financiados por los países ricos, el FMI o el Banco Mundial en los países pobres. Raramente se trata de necesidades primarias de las poblaciones locales, y suelen ser un medio de pago de la deuda externa. En casi todos los casos, los países pobres rechazan las negociaciones con las asociaciones de habitantes para la reubicación acordada de las personas sujetas a desalojo porque declaran que no cuentan con los recursos necesarios. En realidad, destinan esos recursos al pago de la deuda externa. Considerando que la deuda externa es ilegítima, injusta e impagable, y que los gobiernos tienen la obligación de pagar la deuda social, durante el FSA (julio de 2004) la AIH presentó al movimiento anti-deuda y a Via Campesina la propuesta de constituir los Fondos Populares para la Tierra y la Vivienda.Estos son Fondos controlados por las asociaciones de habitantes y por las autoridades locales, para dirigir, particularmente, los recursos de la deuda externa cancelada para financiar políticas habitacionales y urbanas públicas. Esta propuesta fue aceptada por la Asamblea de los Movimientos Sociales Urbanos del FSM 2005 y se unió al debate de los movimientos que reivindican la cancelación de la deuda por parte del G8 (Edimburgo, julio de 2005). Recientemente, ante el fracaso de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, UN-habitat, algunos gobiernos y la Asamblea de los Parlamentarios para el Hábitat aprobaron una propuesta similar. Primer resultado : la conversión de la deuda de Kenya con Italia, de la cual parte importante será empleada para mejorar dos de los barrios mas pobres de Nairobi.

La prop uesta de los « territorios libres de desalojos »

Las administraciones locales deben lidiar con las consecuencias negativas de los desalojos, ya que por lo general no cuentan con los instrumentos normativos y financieros para ofrecer respuestas satisfactorias a los ciudadanos afectados. Considerando que es necesario subsanar las violaciones del art. 11 PIDESC, aunque esto significa oponerse a la normativa nacional, unas treinta administraciones comunales francesas, coordinadas por la comuna de Bobigny, declararon sus territorios “zonas libres de desalojos” en el 2004. Las ordenanzas desencadenaron un duro conflicto con el poder estatal central, pero, al mismo tiempo, ofrecieron un importante margen institucional a los movimientos contra el desalojo y se obtuvieron algunos resultados. A pesar de la suspensión de las ordenanzas por parte de los tribunales administrativos, los gobiernos municipales continuaron apoyando otras iniciativas, como la que concluyó victoriosamente contra el corte del suministro de agua a los morosos. En 2005 y 2006, emanaron una nueva generación de ordenanzas contra el desalojo.
En el ínterin, la propuesta de los “territorios libres de desalojos” fue aprobada también en Italia, donde Roma fue la primera ciudad declarada “desalojos cero”.

Contra las privatizaciones, para reactivar los servicios públicos

La ola neoliberal intenta privatizar los servicios públicos (agua, energía, comunicaciones) y, particularmente, el sector de la vivienda social, considerados la nueva frontera de la ganancia. En África, Asia y América Latina está operando la ofensiva, conducida por el FMI y el Banco Mundial, que quiere imponer las privatizaciones como condición para la concesión de los préstamos, es decir, para la colocación del capital financiero liberado por la crisis de la bolsa. Si la Unión Europea aprobara la Directiva Bolkestein sobre la liberalización de los servicios, alrededor de 18 millones de familias que actualmente viven en casas populares pasarían a un régimen privado. En los Estados Unidos, los recortes en el sector habitacional social, causados por los gastos de guerra, aumentan la precariedad habitacional de las clases populares.En el antiguo bloque del este, Federación Rusa incluida, las reformas en el sector hacen que los inquilinos experimenten por primera vez el drama de los desalojos. Por lo tanto, existe una estrecha vinculación entre las privatizaciones y el aumento de la inseguridad habitacional, percibida por las organizaciones de habitantes en varios países, que por eso organizan iniciativas de lucha locales y nacionales. Dado que se trata de afrontar las políticas creadas por la globalización neoliberal, la AIH está promoviendo en los Foros Sociales Mundiales la constitución de coordinaciones continentales contra las privatizaciones y para reactivar la construcción de viviendas por parte del sector público.

PARTICIPA TU TAMBIEN EN LA RED DE LA SOLIDARIDAD INTERNACIONAL POR LA SEGURIDAD HABITACIONAL!

QUE TU CIUDAD TAMBIEN SE CONVIERTA EN ZON A LIBRE DE DESALOJOS!

CONSTITUYE LOS FOND O S POPULARES PARA LA TIERRA Y LA VIVIENDA!

LU CHA CONTRA LAS PRIVATIZACIONES DE LOS SERVICIOS PUBLICOS!

ADHIERE A LA CAMPAÑA CERO DESALOJOS!